La mitad de la población siria ha tenido que huir de sus hogares, y más de 5,2 millones de personas son ahora refugiados. ¡Este es un llamado urgente a la oración!
La ONU ha advertido de una "catástrofe humanitaria que se avecina", ya que más de 4,5 millones de personas están atrapadas en ciudades asediadas y en áreas de difícil acceso. Siria necesita un alto al fuego de inmediato, para detener los asesinatos de civiles
inocentes y permitir que las personas obtengan la ayuda humanitaria que tanto necesitan.
Christian Aid y otras organizaciones cristianas de ayuda humanitaria están brindando apoyo a algunos de los refugiados más vulnerables. De esta manera, los niños pueden continuar con sus estudios, las mujeres violentadas reciben ayuda, y otros refugiados reciben apoyo legal, social y psicológico. ¡No dejemos de orar por ellos!